• 14 noviembre, 2017

REUNIÓN DEL CONSEJO GENERAL CON HH PROVINCIALES

REUNIÓN DEL CONSEJO GENERAL CON HH PROVINCIALES

REUNIÓN DEL CONSEJO GENERAL CON HH PROVINCIALES 1024 768 Safa Esperanza

XVII Encuentro del Consejo General con los Hermanos Provinciales tuvo lugar en Sigüenza (España) entre el 16 y 22 de octubre. En las palabras de apertura, el Hno. Superior General, dio la bienvenida a todos los participantes: “Convocados a construir fraternidad”, recordaba que nuestra misión como Superiores debe ir encaminada a construir la Comunidad de amor a la que nos invitan nuestras Constituciones y a renovar frecuentemente el sentido de la presencia de Cristo entre nosotros.

Invitados a volver a las fuentes. Tema central y núcleo de nuestras reflexiones fueron las Constituciones. Al inicio de la jornada de trabajo, cada día, un miembro del Consejo General presentaba uno de sus capítulos, enriquecido luego con el comentario de los participantes.

Llamados a ser “hombres de Dios” Al reflexionar sobre la Vida Consagrada de los Hermanos en el cap. II de nuestras Constituciones, considerábamos que nuestra vida debería hacer visible con más decisión la forma de vida de Cristo; que la gente debería descubrir en nosotros “hombres de fe, hombres Dios”. Necesitamos testimoniar con más fuerza la vida en el Espíritu a la que hemos sido llamados que es hacer de la vida un camino que recorra el misterio pascual, configurándonos con Cristo, y asumiendo por consiguiente sus sentimientos y estilo de vida.

“A vino nuevo, odres nuevos”. Una mirada a las listas de los Hermanos que formamos la Congregación en estos momentos nos ha llevado a realizar una detenida reflexión. El empuje de las vocaciones en Asia se ve contrarrestada por la avanzada media de edad de los Hermanos de los países occidentales que primero acogieron la presencia de la Congregación.

Esta situación, nos hace pensar, una vez más, en la necesidad de una organización distinta de la Congregación. Se hace necesario dar continuidad a los pasos ya dados en la unión de Provincias. Nos sentimos impulsados a recorrer un camino, en odres nuevos, que dé paso a una nueva vida del Instituto

Entre otros aspectos, consideramos que es necesario dar estabilidad a las nuevas fundaciones y, en la medida de lo posible, estar abiertos a otras en los próximos años. Somos conscientes de las dificultades que suponen estos retos, pero vemos que es necesario avanzar en ese sentido para dar continuidad al carisma recibido. Los próximos Capítulos Provinciales pueden ser un momento oportuno para discernir el camino a seguir, como lo será el Capítulo General de 2019.

Herederos y transmisores de un carisma. Al conocer la situación de cada una de las Provincias hemos podido apreciar que los Hermanos seguimos valorando la vocación recibida y que, a pesar de ciertas dificultades y debilidades, en cada Comunidad se trata de compartir el don de la fraternidad que Dios nos ha regalado. Felicitamos a los Hermanos que ponen tanto entusiasmo en la promoción y cultivo de las vocaciones.

Asegurar la fidelidad al carisma en la misión fue precisamente la intención de la Orientación IV del Capítulo General que invitaba a analizar y planificar el futuro de las Comunidades y las obras. Hemos puesto en común los pasos que se están dando en la Congregación en ese sentido. La creciente y ya numerosa presencia de laicos que trabajan con los Hermanos en una misión común que tiene su fundamento en el bautismo, nos ha llevado a recordar la importancia de desarrollar el carisma que el H. Gabriel nos dejó. Animamos, desde esta convicción, a realizar todos los esfuerzos y poner los medios suficientes para formarnos juntos, Hermanos y laicos, en los rasgos esenciales de nuestro carisma. Contemos con las Fraternidades Nazarenas para que este carisma crezca en nuestros ambientes.

Compartir que estos han sido días de auténtica fraternidad. No han faltado, junto a los momentos de trabajo y oración, otros momentos de sana y fraternal convivencia como la visita a la ciudad de Soria

Esta experiencia se ha visto acompañada por la excelente acogida y cuidado que nos han dispensado los Hermanos de la Comunidad de Sigüenza, a quienes agradecemos tantos detalles de fraternidad para con nosotros.

Que la Sagrada Familia y el Venerable Hermano Gabriel nos acompañen y ayuden a ser odres nuevos.