«HERMANOS DE LA SAGRADA FAMILIA»
«En nazaret: se oraba, se amaba y se trabajaba»
“El Instituto de los Hermanos de la Sagrada Familia, fundado en la diócesis de Belley por el Hermano Gabriel Taborin, es un Instituto religioso de Hermanos de carácter laical de derecho pontificio, aprobado el 28 de agosto de 1841. (C.1)
Gabriel Taborin Poncet nació el 1 de noviembre de 1799 en Belleydoux, diócesis de Belley (Francia).
En ese momento Francia vivía el final del proceso revolucionario que acabó con el Antiguo Régimen. Las hostilidades hacia la Iglesia habían cesado y el ambiente favorable para vivir con libertad la religión se extendía progresivamente. En este marco histórico, de reconstrucción de la vida parroquial y de valoración de la educación como medio de promoción humana y cristiana, el Hermano Gabriel Taborin y funda la Congregación de los Hermanos de la Sagrada Familia en 1835.
La Congregación o Instituto fue aprobado por el Papa Gregorio XVI en Roma el año 1841. La intuición del H. Gabriel era que sus religiosos fuesen Hermanos al servicio de las parroquias y de los pueblos, en las funciones de maestros, catequistas y animadores de la liturgia. Una misión vivida por él desde su juventud en algunos lugares, entre los que está su pueblo natal.
Ésta fue la intuición que le llevó a fundar un Instituto de Hermanos, los Hermanos de la Sagrada Familia. El Papa Juan Pablo II, el 14 de mayo de 1991, declaró al Hermano Gabriel Taborin “Venerable”.
- “Sus miembros son religiosos que, respondiendo a la llamada del Padre, y movidos por el Espíritu Santo, consagran a Dios su vida en la Iglesia conforme al carisma del Instituto.” (C. 2)
Nuestra vida religiosa de Hermano, hunde sus raíces, en el mensaje mismo del Evangelio: “Vosotros sois todos Hermanos”. (Mt. 23,12).
Se trata de acentuar y testimoniar en medio del mundo la fuerza de la fraternidad, el testimonio de los valores del Evangelio y la imitación radical de la forma histórica de vida de Jesús.
- “El Hermano Gabriel Taborin, consagrado totalmente a Dios y a la Iglesia, es, a la vez, el Fundador, el Padre y el
primer miembro, siempre vivo y presente, de la familia religiosa de los Hermanos. (C. 3)
El Hermano Gabriel asumió esta condición de Hermano y murió como Hermano a pesar de la fuerte influencia de la clericalización de la Iglesia de aquel momento.
Dejó escrito a sus Hermanos: “Lleváis el dulce nombre de Hermanos, no permitáis que os llamen de otra manera. Los nombres de las dignidades inspiran e imponen respeto; este por el contrario, sólo sugiere sencillez, bondad y caridad” (H. Gabriel. Guía art. 112).
Con un espíritu y una espiritualidad inspirada en la Sagrada Familia
“Los Hermanos contribuyen a realizar
el plan de salvación
mediante el espíritu propio del Instituto,
que es el espíritu de familia.
Este espíritu deriva de los lazos vitales
que unían a los miembros de la Sagrada Familia de Nazaret
y cuya fuente primera es la Santísima Trinidad”.
(Constituciones 11)
Los Hermanos vivimos en Comunidad, llevados por una forma propia de vivir el Evangelio y de proclamarlo. Nuestras relaciones se basan en el “espíritu de familia” que vivimos allá donde nos encontramos.
Nos inspiramos en la vida familiar de la Sagrada Familia en Nazaret. La respuesta que Jesús, María y José dieron al Padre mediante la oración, el trabajo y el amor vivido en lo cotidiano nos invita a vivirlo en las circunstancia de hoy. Por lo tanto, los Hermanos estamos llamados a actualizar y prolongar el dinamismo familiar de Nazaret, con una vida sencilla y activa, en todas las circunstancias de nuestra vida.
Dedicados a la misión evangelizadora
“Los Hermanos están abiertos
A las necesidades de la Iglesia local.
Participan en su pastoral
Principalmente por medio de la educación cristiana,
La catequesis y la animación litúrgica”.
(Constituciones 16)
Los Hermanos de la Sagrada Familia tenemos muy presente que para nosotros, el apostolado es una consecuencia de nuestra entrega generosa a Dios que se prolonga en los hombres.
Los Hermanos compartiendo el carisma del Fundador, el V. Hno. Gabriel Taborin, hemos sido llamados a evangelizar en la Iglesia local, especialmente en tres ámbitos que fueron queridos y vividos por él:
– la educación cristiana,
– la catequesis,
– la animación litúrgica
.
Los Hermanos de la Sagrada Familia estamos presentes en diferentes países. Nuestra misión educativa y pastoral, el espíritu de familia y la espiritualidad nazarena son una buena noticia para todas las culturas.
En la actualidad la Congregación está presente en Francia, Uruguay, Italia, Argentina, España, Burkina Faso, Brasil, Ecuador, Costa de Marfil, México, Filipinas, India, Colombia, Benin, Indonesia y Timor Leste.